Ballesteros: 'Viajamos a Turquía con la voluntad de ganar, pero sabemos que no será nada fácil'

El alcalde de Tarragona y presidente de Tarragona 2017, Josep Fèlix Ballesteros, acompañado del presidente ejecutivo de Tarragona 2017, Mario Rigau, y la concejala de Deportes, Natalia Rodríguez, ha llevado a cabo esta mañana una rueda de prensa con las sensaciones de la candidatura tarraconense de cara al próximo sábado, día en que se celebrará en Mersin la asamblea en la que se decidirá qué ciudad, Tarragona o Alejandría, será la sede de los Juegos del Mediterráneo del 2017.

Mario Rigau, Josep Fèlix Ballesteros y Natalia Rodríguez, durante el rueda de prensa

La voluntad es clara: "Viajamos a Turquía con la voluntad de conseguir la victoria", afirma Ballesteros, quien muestra, sin embargo, mucha precaución: "Sabemos que no será nada fácil". El alcalde ha explicado que la estrategia tarraconense el próximo sábado se basará en cuatro grandes ejes: "nuestras garantías institucionales, ya que hay cartas firmadas por parte de los gobiernos de Cataluña y el Estado en la que se comprometen a darnos el apoyo económico requerido, el nivel de entusiasmo voluntario, ya que somos cerca de 4.000 voluntarios y eso se valora mucho, la excelencia del proyecto organizativo y de nuestro dossier de candidatura, y finalmente el hecho de no estar sometidos a un hipotético cambio de gobierno estatal ".

De hecho, Ballesteros ha explicado que "si fuera por nuestro proyecto, por nuestro dossier y por nuestra fiabilidad, ganaríamos seguro, porque en estos aspectos somos insuperables". Desgraciadamente para las opciones tarraconenses, "hay muchos intangibles que entran en juego, por lo que no queremos tirar las campanas al vuelo". Principalmente, las dudas surgen con un sistema de votación "que tiene cierto parecido al de Eurovisión, ya que a veces, los países se votan entre ellos por afinidades culturales o geopolíticas antes que por el propio proyecto". Esto hace que "llevamos días haciendo cálculos, pero incluso nosotros mismos no acabamos de tener claro cuáles serán los países que nos votarán a nosotros de forma segura". "Es un sistema muy complejo, ya que los comités olímpicos tienen tres votos y votan de forma individual y secreta. De hecho, puede que un representante de un comité pueda votar de manera diferente a la de sus compañeros. Además, hay diecisiete representantes del COI que tienen derecho a voto pero pueden decidir si van a votar o no lo harán. Es por ello que a día de hoy es muy difícil predecir hacia dónde irán los tiros, aunque somos optimistas ".

Esta precaución también se debe a que "aunque su situación política desgraciadamente es complicada, ellos son una ciudad con millones de habitantes y tienen mucho poder económico. Además, nunca han dejado de trabajar en los Juegos Mediterráneos y somos conscientes de que tienen mucha fuerza ". En este sentido, la precaución también ha provocado que por el momento no se quiera programar ninguna fiesta popular para celebrar la victoria: "Que la gente salga a la calle y se lo pase bien, que ya tendremos tiempo de celebrar".

Así pues, predecir lo que sucederá el próximo sábado es imposible. Desde Tarragona se viaja con mucha precaución pero con muchas ganas de victoria.Son muchas las posibilidades y los intangibles que pueden decantar la victoria hacia un lado o hacia otro. Tarragona 2017, sin embargo, puede estar tranquilo: ha hecho los deberes y los ha aprobado con nota.