- Dame poderes para el Año Nuevo.
La maga le entregó un libro cerrado con un candado y le dijo:
- Este libro te permitirá hacer realidad tus sueños. Pero no puedes abrirlo hasta la Nochevieja del año próximo. Si lo cuidas adecuadamente estos 366 días, habras demostrado ser digno de su sabiduría.
El viajero caminó durante todo ese año con una fuerza nueva, con una ligereza en los pies y una sonrisa permanente en la cara. Saber que en su mochila llevaba la llave que le permitiría cumplir todos sus sueños a partir del año siguiente, le hizo convertirse en una persona confiada, segura, poderosa y atractiva.
A lo largo de su viaje en ese año, conoció a la mujer de su vida, que se enamoró locamente de su sonrisa y su energía, y le acompañó en el camino.
Como no podía ser menos en un futuro hombre con poderes, la dejó embarazada nada más amarla, y tuvieron un par de hijos sanos y fuertes, mellizos, antes de llegar el invierno.
Y encontró un tesoro escondido en una montaña que nadie antes había osado escalar, y convenció a un viejo huraño más rico que avaro para que le vendiera a buen precio la casa de sus sueños, y por fin tener un hogar, al lado del camino.
El 31 dediciembre del Año Viejo, el viajero acudió junto a la maga de nuevo, con el libro cerrado en mano.
- Ya estoy aquí, maga. Y aquí te traigo el libro, tal y como acordamos.
- Me alegra verte, viajero. Tienes un aspecto estupendo.
- Ha sido un buen año, maga. En verdad, ha sido el mejor año de mi vida. Y seguro que los siguientes serán aún más espectaculares, en cuanto abra este libro.
- Tienes razón. Es la hora. Ábrelo.
El libro, ante el estupor del viajero, sólo era un libro con hojas en blanco.
- Maga, pero .... ¡¡¡ no hay nada escrito en él !!! ... ¿Cómo va a proporcionarme este libro poderes?
Como lo ha hecho a lo largo de todo este año. Enseñándote la base de toda sabiduría: que tu vida la escribes tú a cada paso del camino. Y que todo está aún por hacer. Todo el poder está en tu propia FÉ, en tus pies y en tus manos. Como siempre ha estado. Y el libro te lo recordará a cada paso.
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